Por un lado, en un plato balanceado debe haber:
- Un cereal integral, cocido de una forma simple o preparado junto con otros ingredientes en cantidad equivalente a 1 o 2 tazas.
- Una preparación más especial que contenga:
- Una proteína (tofu, seitán, soja). Para más información sobre las proteínas, click aquí.
- ó una leguminosa (aduki, garbanzos, lentejas, etc.). Para más información sobre las legumbres, click aquí.
- ó harina integral
- ó vegetales de raíz (zanahoria, bardana, nabo, etc.). - Un vegetal de hojas verdes como cebollita de verdeo, berro, hojas de nabo, grelos, etc.
- Vegetales cocidos de forma simple, solos o combinados (cebolla, repollo, coliflor, brócoli, calabaza, chauchas, brotes, etc.)
También se pueden incluir sopas.
Por otro lado...
Hay varias recomendaciones a tener en cuenta a la hora de planificar nuestras comidas. Es necesario tratar de incluir la variedad en los sabores: las comidas pueden ser picantes, saladas, amargas, dulces, agridulces, amargas.
Tan importante como explorar los matices en los sabores, es básico la inclusión de la diversidad de las verduras y hortalizas: raíces, hojas verdes, calabazas, coles, etc. De ésta manera nuestra alimentación se torna más entretenida y disfrutable. Además, se disminuye el peligro de caer en carencias alimentarias debido a que lo que no nos aporta un alimento, nos lo aporta el otro.
Por eso es importante utilizar una proteína distinta cada día, lo que no quiere decir que sea obligatorio el consumo de proteínas todos los días.
También es muy importante la proporción. Un modelo aplicable en la mayoría de los casos debería tener entre el 50 y 60 por ciento de cereales, 25 por ciento de verduras (cocidas, en ensaladas, o crudas) y un 10 por ciento de proteínas.
3 comentarios:
Me guardo esta entrada para tenerla muy presente ; )
Gracias
Cualquier consulta... acá estamos!
Como compongo una granola salada
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